
El libro funciona como un manual singular de la cultura emocional contemporánea, en el que la autora explora nuevos términos y conceptos que han ingresado a nuestro léxico para describir relaciones interpersonales complejas y estados psicológicos. Desde el abuso hasta la toxicidad, la obra analiza la evolución del lenguaje de las emociones y la manera en que la sociedad moderna comprende y verbaliza su experiencia emocional.