
Una colección de poesía de Andréi Bely, en la que el autor explora los motivos simbolistas característicos de su obra. El volumen refleja los estados de ánimo místicos y las búsquedas filosóficas del poeta, combinando imágenes de sueños y llamas como metáforas de la búsqueda espiritual y la transformación. El libro constituye un claro ejemplo del Simbolismo ruso de principios del siglo XX.